Thursday, September 11, 2014

Chiapas - Dia 9 - Agua Azul


Día 9 – Agua Azul (Marzo 15, 2014)

 
 


 

Siempre tuve la ilusión de ir a las cascadas de Agua Azul.  En una promoción turística de los 70’s salía la Miss México con un vestido de noche, portando su corona y cetro y diciendo: “desde las cascadas de Agua Azul, en el estado de Chiapas, México te saluda.” Recuerdo haber visto aquel caer de agua majestuoso sobre unas pozas azules cristalinas.  Tristemente, nos tocó ir en un día medio nublado y después de fuertes lluvias, en que el río se veía café-verdoso y en lugar de disfrutar de aguas prístinas donde uno puede conectarse con la naturaleza, el parque ha quedado convertido en un mercado de artesanías.  Quizá si la expectativa no hubiera sido tanta, me habría gustado más.  Prefiero el Chiflón y Las Nubes, pero eso no le resta belleza a este lugar, simplemente nos tocó un mal día y yo no me imaginé que estuviera tan comercializado.

De allí viajamos a San Cristobal de las Casas.  Son tan sólo 200 Km. pero el viaje nos tomó casi cuatro horas.  Es una carretera serrana de un carril en cada dirección, con muchos baches y topes y un gran tráfico de tráileres. No había forma de hacer menos tiempo. Además pasamos por muchos caseríos.  Mucha gente tenía sus ventanas abiertas y las casas eran un cascarón vacío, desprovisto de muebles, con hamacas colgando de unos postes.  Muchas familias estaban de pie asomadas por la ventana, viendo el mundo pasar frente a ellos. Una vida que se me antojó un poco triste. Todo cambió al llegar a San Cristobal. ¡Qué pueblo tan lindo, pintoresco e internacional!

Wednesday, September 10, 2014

Chiapas - Dia 8 - Palenque


Día 8 – Palenque (Marzo 14, 2014)


 


 

Las ruinas de Palenque están como a 20 minutos del hotel.  No quisimos irnos muy temprano porque estábamos muy cansados. Nos despertamos y fuimos a desayunar a un lugar del centro que habíamos visto la noche anterior. 

De allí venimos llegando a Palenque casi a las 12.  Conseguimos un guía y le pedimos que nos diera el tour en español, pero que nos hablara despacio para que todos pudiéramos entender. Esto fue porque había un guía que nos estaba presionando para que tomáramos el tour en inglés y nos cayó gordo.

El señor sabe mucho de la historia de la zona y nos contó que de niño, su papá ayudaba con las excavaciones y para él, esto era su parque de juegos. Nos enseñó el mapa diciendo que sólo un 10% de los edificios han sido descubiertos.  Es una gran ciudad. Visitamos las estructuras más importantes (seis o siete edificios) y luego ya nos dejó solos para que siguiéramos el recorrido.  De allí nos fuimos al museo, donde hay mucha información y luego nos fuimos a comer un pollo asado en una fondita donde nos atrajo el aroma. Había mucha gente – gente de pueblo, de oficina, gente local. Ese es el tipo de lugares que a nosotros nos gusta frecuentar.

Regresamos al hotel a dormir una siesta y luego nos fuimos al spa a tomar masajes.  El hotel incluía una sesión de temazcal. Fue algo interesante…

Tuesday, September 9, 2014

Chiapas - Dia 7 - Yachilan


 

Día 7 – Yachilan (Marzo 13, 2014)
 


 

Despertamos tempranito y desayunamos cereal. Nos despedimos de Frontera Corozal. Nos encontramos en el embarcadero con el otro grupo y el lanchero dijo que serían 45 minutos por el río Usumacinta.  Estaba nublado y hacía frío. Por supuesto teníamos chamarras, gorras y ponchos, pero todos se quedaron en el carro. Como la ley de Murphy, empezó a llover. Cuando llegamos al parque de la zona arqueológica, era muy temprano y tan sólo había otro grupo de turistas.  Es un sitio mágico.  La entrada principal tiene un efecto dramático porque te lleva por una vereda que desemboca en una estructura por la que tienes que bajar unos escalones en completa oscuridad. Le llaman el laberinto. Al salir a la luz, te encuentras en una explanada llena de pasto y árboles centenarios con los edificios distribuidos a lo largo del perímetro.  No llevábamos guía y tan sólo aprendimos lo que nos decían los libros de turistas.  Que el lugar floreció entre los años 800 a 1000 D.C., que sobresale por las pinturas de sus dinteles y las estelas que aún conservan sus grabados originales.  Hacia un lado está el río y hacia el otro el cerro, donde se esconden muchas otras ruinas.  Algunos edificios por la humedad y la oscuridad, atraen murciélagos. Estuvimos allí como dos horas y no alcanzamos a cubrir toda el área.  Me gustó mucho el paseo en lancha. Al regreso pudimos ver a la gente lavando su ropa en el rio, o echando redes para pescar y a los niños, ignorantes de la pobreza en que viven, disfrutando de un chapuzón.

De allí manejamos hasta Palenque, donde ya teníamos reservado el hotel.  Este tramo de la carretera pasa por muchas rancherías y los niños y mujeres se paran cerca de los topes a vender sus cosechas.  Fue algo triste y a la vez bastante molesto.  Los niños se exponen a que los atropellen, pues son tan pequeños que apenas podemos verles la frente por encima del capacete.

Llegamos a Palenque y nos fuimos al centro a comer Tacos al Pastor.