Sunday, August 21, 2011

Agosto 2011 - Renacimiento


Se vuelve a abrir el Blog de Lula Rules – El último post apareció en la víspera del otoño 2008, y ahora nos encontramos tres años más tarde bajo el umbral empolvado y descuidado de un sitio abandonado.
Gracias a mi amigo André que me recordó de su existencia, regreso aquí a volver a poner mis ideas, pensamientos y reflexiones acerca de la vida y los sueños de escritor.
Tres años no parecen mucho en tiempo virtual pero es toda una vida. Imagínense que no recogen el correo por tres años, o no riegan las plantas, o no lavan la ropa. Todo se echa a perder. No se trata de que no haya seguido escribiendo, al contrario. Ya tengo mi buena colección de cuentos pero este lugar se había quedado en el olvido.
Precisamente hoy se marcharon mis hijos de regreso a la universidad. Empiezan el cuarto y el segundo año de carrera, por lo tanto las emociones no son tan fuertes como la primera vez que dejaron el hogar. Mi ánimo, ya preparado para la partida, les dice adiós y me regreso a mis ocupaciones sin mucho traspié. Así pues, mi blog de Lula Rules, aquí me tienes de regreso para poner cosas que nadie lee y nadie comenta pero que dan rienda suelta a mi imaginación y me mantienen alerta a la escritura.
Anexo foto de la granja familiar de la familia Bjerk en el norte de Minesota. Abandonada a merced del tiempo, totalmente destruida por la falta de cuidado y sin embargo, llena de recuerdos de todos los que alguna vez pusieron pie en lo que fue el hogar familiar hace setenta años. Los dueños actuales mantienen abejas en el sitio y fue muy interesante visitarlo y escuchar el perpetuo zumbido de las obreras desempeñando su intensa labor.
No abandonen los sueños…se destruyen.

1 comment :

LULA RULES! said...

Hoy es julio 15 del 2012.

Vine a despolvar tu blog, pero me ganaste.

Los blogs tienden a recordarme a objetos que uno encuentra sin querer, cuando se busca un objeto que uno sabe que tiene pero que no lo encuentra en ningún cajón de los muchos que inevitablemente tenemos en casa por doquier.

Hoy precisamente, mientras buscaba un accesorio para arreglar un compresor para inflar las llantas de mi bicicleta, me encontré escarbando como antropólogo urbano en una de mis tres cajas de herramientas y encontré un chorro de cosas que ya no sirven y que guardé hace mucho para tenerlas "por si las moscas".

Te cuento que desde entonces no ha habido ni mosca ni mosquito alguno.

Afortunadamente, esta semana hay recolecta de basura de objetos que ha mucho debieron de haber sido depositados en el baurero municipal.

La esperanza es lo último que se pierde.

André